El 3 y 4 julio fueron llenos de sentimientos encontrados para la capitana de Universidad, que participa en la Liga Femenina de Fútbol (Lifeful). La volante de marca Yaneth Viveros recibió la convocatoria para la selección boliviana, que está participando en la Copa América Femenina de Colombia, el domingo por la noche, tras la lesión inesperada de Sheyla Anagua Cardozo, de Mundo Futuro.
De esa manera, Viveros, que no contó en los dos micro-ciclos realizados por la nueva DT Rosana Gómez, recibió la buena noticia, con el inconveniente de que debía sacarse pasaporte gastando de su bolsillo lo antes posible, pues el viaje de la Verde a la sede del torneo era la madrugada del martes.
Logró cumplir su objetivo en un día ajetreado y quedó lista para viajar, con el cambio de nombre confirmado por la Conmebol, el lunes a las 16:00. Fue inscrita con el número 10, pero lo que no se imaginó fue que no alcanzó el tiempo para la modificación del pasaje a su nombre.
La única forma para que viaje era de que ella corra con el costo del pasaje, pagando alrededor de $us 1.700, una opción que no prosperó, pues la que debía hacerse cargo de ese gasto era la Federación Boliviana de Fútbol (FBF). A final no viajó y se convirtió en la jugadora fantasma de la selección femenina de Bolivia, cuyo nombre figura entre las inscritas a la Copa América de Colombia, que está en plena disputa, pero con ella entrenándose en Santa Cruz para comandar este fin de semana a Universidad en el partido ante Blooming, por la Primera A de la Lifeful.
“Fueron emociones altas y bajas, pero al final no se pudo. Fueron horas intensas que viví, pues el pasaporte lo saqué en tres horas. Me emocioné bastante, pues para mí es un honor integrar la selección nacional. Todo el mundo me pregunta que pasó”, sostuvo Viveros, que ya ha integrado varias selecciones bolivianas.
