En una jornada llena de emociones, Santa Cruz se quedó con las coronas de las dos modalidades en disputa en el Nacional Infantil de Taekwondo: Poomsae (demostraciones) y Kiorugui (combate). El campeonato, que se desarrolló el sábado en el poligimnasio Santa Rosita, significó el regreso de la competencia después de dos años de parón por la pandemia.
Con la presencia de más de 1.000 espectadores y unos 300 taekwondistas, Santa Cruz comenzó su cosecha de primeros lugares en Poomsae, obteniendo tres medallas de oro, tres de plata y cuatro de bronce, sumando un total de 34 puntos.
Segundo quedó Oruro con una dorada, tres de plata y dos de bronce, acumulando 18 puntos. Tercero se ubicó La Paz, con solo una de oro, y un puntaje de 7.
Luego fue el turno de Kiorugui, modalidad en la que también impusieron condiciones los taekwondistas anfitriones. Santa Cruz sumó cuatro doradas, cuatro de plata y una de bronce, con un puntaje de 37.
Segundo fue La Paz, con tres de oro y tres de bronce, acumulando 24 unidades. La tercera ubicación fue para Potosí, con dos de oro, una de plata y una de bronce, sumando un puntaje de 18.
Los padres vivieron su fiesta
Gran parte de los espectadores fue conformado por los padres de familia, que estuvieron durante toda la jornada aplaudiendo y viviendo la emoción de la competencia al lado de sus hijos. Ellos abarrotaron entre las 10:00 y 21:00 las instalaciones del poligimnasio Santa Rosita.
Distinción
Durante el acto de inauguración del Nacional Infantil se vivieron momentos emotivos, como la entrega de una distinción especial al expresidente de la Federación Boliviana de Taekwondo (FBT), Alejando Mansilla, que estuvo durante ocho gestiones al mando de la entidad, entre 1996 y 2022.
“Fue un gran presidente que dejó huella, pues entre sus gestiones destacadas estuvo traer y organizar dos mundiales G1 al país”, sostuvo la actual titular federativa, Ana Hernández. “Ojalá Dios me dé vida para seguir trabajando por este deporte. Desde donde me encuentre voy a apoyar”, sostuvo Mansilla.