Destinada a ser demolida, para que en ese espacio se termine de completar el proyecto del estadio Tahuichi, a la piscina e infraestructura, ubicada afuera del escenario departamental, le quedaba poco tiempo de vida. Por ello, se le dejó de realizar mantenimiento desde el inicio de la pandemia del Covid-19, en marzo de 2020.
Aunque el destino de piscina está sellado, pues tarde o temprano será demolida, la Asociación de Deportes Acuáticos Santa Cruz (Addasc), que comanda Rim Safar, decidió darle vida, para palear una necesidad urgente, que los nadadores cruceños cuenten con una pileta, pues se cansaron de esperar que la nueva piscina Olímpica de la Villa Deportiva Abraham Telchi, que tuvo una inversión millonaria, esté en condiciones de ser utilizada.
Esa obra, que se inició a comienzos de 2015 en la gestión de Rubén Costas al mando de la Gobernación, y que debía ser entregada en tres años, sigue sin concluirse. Ya se ha ingresado al noveno año y la Addasc no ve miras que esté disponible a corto plazo.
Esta situación desesperó a la dirigencia de la natación cruceña, a tal punto que decidió realizar las mejoras al escenario, que estaba casi en ruinas. Primero solicitaron ayuda a la Gobernación, que les informó que no podía apoyar, pues la piscina del estadio iba a ser derribada.
Ante la negativa, la Addasc inició las obras con recursos propios, conseguidos gracias a la ayuda de la empresa privada y varios amigos de la natación. De esa forma, y tras tres meses de mejoras, la piscina que estaba en ruinas, ahora luce radiante, y eso que aún hay obras sin concluirse. Allí ya está funcionando la escuela de natación de la asociación.
Safar explicó que entre las obras realizadas están: vaciado y cambiado de azulejos de la piscina, arreglo del techo, pintado y colocación de la iluminación. “En vista de que no tenemos y no hay víspera de contar con una piscina en la Villa Deportiva, la Asociación. Departamental de Deportes Acuáticos decidió proceder a refaccionar y mejorar la del estadio”, concluyó Safar.
