Para ella todo ha sido muy rápido, pues hasta el 2017, año en el que se inició en el atletismo, este deporte no era su pasión. Eso sí, la cruceña Guadalupe Torrez Torrez se fue llenando de motivación con la llegada de los triunfos y récords nacionales, hasta consolidarse en los dos últimos años como la más veloz del país en los 100 metros planos, prueba en la que ha conseguido la tarjeta de invitación para ser parte de los Juegos Olímpicos de París 2024 (26 de julio al 11 de agosto).
“La pasión en el atletismo me nació de golpe luego de asistir a un Sudamericano, donde viví de cerca la competencia internacional y me propuse entrenarme para llegar lejos”, afirma esta campeona, de 23 años, graduada hace un año de licenciada en nutrición y dietética en la Universidad Evangélica Boliviana (UEB), que es otro mérito para ella, pues hizo el esfuerzo para destacar en el deporte y en sus estudios.
En los momentos de triunfo, Guadalupe no se olvida de su entrenador desde sus inicios, Carmelo Suárez, que fue quién la recibió en este deporte luego de que la dejara a su cargo el profesor Óscar Muñoz, del Liceo de Señoritas Monseñor Santistevan, que ya había notado la velocidad de Guadalupe. “Recuerdo que me dijo: “Sos para atletismo, y no se equivocó””.
“Ser parte de los Juegos Olímpicos de París es también un sueño cumplido para mi entrenador Carmelo, por todo lo que ha trabajado para que pueda ser la mejor de Bolivia”, sostiene la excampeona nacional en gimnasia artística, cuanto tenía entre 13 y 14 años e integraba el Club 7. También practicó natación, pero su lugar en el mundo era el atletismo.
Agrega que es consciente que aún hay que esperar hasta el 30 de junio para que la Federación Atlética de Bolivia (FAB) haga oficial su wild card, pues esa es la fecha en que se cierran las posibilidades para que otros atletas puedan hacer marcas. “Estoy feliz, y no me quiero quedar ahí. En la próxima buscaré ir con marcas, ese será mi segundo sueño a cumplir”, dijo Torrez, que posee el récord nacional de los 100 metros planos mayores, y que lo ha ido bajando desde hace dos años: 11”79, 11”67 hasta su actual marca 11”57.
Desde que logró su primer récord en 2018, la reina de la velocidad en Bolivia no ha parado de superarse obteniendo más de 10 nuevas marcas nacionales, desde menores, juveniles y mayores. Su próximo gran desafío serán los JJOO de París 2024, allí conformará una delegación nacional junto a los nadadores cruceños, María José Ribera y Esteban Núñez del Prado, y al maratonista, Héctor Garibay.