Fue el único deportista cruceño que estuvo en los Juegos Olímpicos de Tokio, realizados en 2021. Al final de ese año, cuando se creía que el país tendría un nadador de élite para rato, vino lo impensado: Gabriel Castillo, con solo 20 primaveras vividas, se retiraba del deporte que practicó desde los 6 años y a partir de los 12 de forma profesional.
“La verdad que la ayuda llega cuando se está en lo alto, cuando ya es tarde y se ha perdido bastante tiempo en la formación. Esa situación me llevó a pensar en el futuro, como profesional, y decidir dejar este deporte”, explica Castillo, que está en el cuarto semestre de la carrera de medicina en la Universidad Católica de Bolivia.
Este campeón, que logró más de 15 récords nacionales, entre ellos 8 absolutos, sigue asistiendo al gimnasio para mantener la forma. ¿Y la natación? “No, he vuelto a nadar”, responde tajantemente Gabriel, que compitió por última vez en el Mundial de Piscina Corta de Natación de Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), de diciembre 2021.
Gabriel se formó en dos clubes tradicionales de Santa Cruz. Hasta 2017 estuvo en el Samix y luego pasó al Medley, comandado por Yassir Abdalla, su entrenador con el que estuvo en los JJOO de Tokio 2021.
Pese a que ya dejó la natación, Castillo no se olvidará nunca de la marca olímpica de 740 puntos, que consiguió cuando paró el cronómetro en 57”30 en los 100 metros espalda. Este logro permitió que reciba la carta de invitación para cumplir un sueño, competir en los Juegos Olímpicos.
Consultado sobre si hay posibilidades de que vuelva a competir, Gabriel afirmó que no, y que su futuro tiene que ver con la medicina, aunque aún no decidió cuál será la especialidad a la que se dedicará.
