En el congreso nacional de básquet que se realizó el primer fin de semana en Tarija, uno de los temas a tratar será el Artículo 4 de la Resolución 2/2023 de la Federación Boliviana de Basquetbol (FBB), el cual se logró modificar y este martes será tratado en el consejo del básquet cruceño.
Cabe recordar que dicho artículo señala que para jugar una categoría mayor (primera, ascensos, U-21, etc.) los jugadores edad deben ser mayores de edad (tener 18 años cumplidos). Algo que ha generado malestar en muchas personas ligadas al deporte, ya que muchos jugadores de 15 y 16 años ya están destacando en las categorías mayores.
“La norma fue modificada no se dejó sin efecto, se modificó para que puedan jugar chicos de 17 años en primera y se permitida dos chicos de 15 años que tengan las condiciones para hacerlo”, explicó Roberto García, presidente de la Asociación Municipal del Básquet Cruceño
Según García, en el consejo central nadie refuto la modificación y aceptaron. El dirigente señaló que llevar a cabo el cambio fue complejo, pero que se puso como ejemplo la liga de futbol profesional, en la que han llegado a jugar chicos de 15 años. “Pele jugó un Mundial a los 16 años y salió campeón y jugador revelación. ¿Por qué se quiere cuartar que chicos de esa edad jueguen en categorías competitivas? Nuestra propuesta fue apoyada por todos”, dijo.
Por su parte, ‘Pepe’ Camacho, entrenador de Leones de Hamacas, explicó que, en el consejo a realizarse este martes, se verá la normativa. “Somos autónomos, podríamos decidir algo diferente”, expresó, a tiempo de indicar que la modificación tiene aspectos positivos y negativos. ¿Qué hacemos con los jóvenes que tienen 14 años y juegan mejor que los de 17? Se cuestiona.
A decir de Camacho, las asociaciones son autónomas y deben tomar sus propias decisiones. Además, tiene sus reparos con los dirigentes locales, los cuales considera están pendiente a lo que dice la Federación Boliviana de Basquetbol.
Otros actores del básquet cruceño, sostienen que la norma es una forma de bloquear el progreso que ha logrado Santa Cruz en los últimos años gracias a sus jóvenes valores, algo que pone en riesgo la hegemonía de Tarija y Cochabamba.
