El doctor García, como lo llaman muchos, pasó un susto, tuvo que ser operado y necesita recuperar su salud en dos meses, aproximadamente. El presidente de la Asociación Municipal de Básquetbol (AMB), Roberto García, está pasando un momento complejo en su salud, pero gracias al respaldo de su familia y amistades tiene todo bajo control y los ánimos en los más alto.
El dirigente deportivo tiene diabetes hace más de 15 años y el mes pasado sufrió una descompensación de su azúcar; al mismo tiempo tenía una pequeña herida en el pie, lo que se complicó por la lenta atención de la salud pública, indica él. “Tuvieron que operarme, para quitarme dos dedos y una parte de la masa de mi empeine (parte superior del pie). Estuve internado, pero ahora todo está bien”, dijo.
De acuerdo a la recomendación de los médicos, García debe reposar poco más de mes y medio y recibir, periódicamente, curaciones especiales. Sin embargo, su labor como cabeza de la AMB no está desatendida, ya que sostiene reuniones por zoom con su directiva y también sabe que sus acompañantes en la asociación llevarán adelante lo que queda de la gestión sin inconvenientes.
Roberto García Carreño siempre fue un apasionado por el deporte, puesto que desde joven practicó varias disciplinas, llegó a ser entrenador y ahora dirigente. “Hace unos 30 años jugué futsal en el Club Águilas, también competí en fútbol y entrené al Club Cooper. Después jugué en el Club Kennedy de básquet, al que también llegué a dirigir”, recordó rápidamente.
Ya en 2007 creó su propio club de básquetbol, Spurs Santa Cruz, al que dirigió como entrenador y como dirigente, para escalar en la directiva de la asociación hasta la presidencia.
