Por diversos motivos, Bolivia pierde fuerza en el atletismo con miras a los Juegos Panamericanos de Santiago, a desarrollarse del 20 de octubre al 5 de noviembre de 2023. Dos de sus mejores exponentes, los orureños Héctor Garibay y David Ninavia, no estarán en la competencia.
El primero en anunciar que no iba a competir fue Garibay, que informó a la Federación Atlética de Bolivia (FAB) que decidió centrarse en su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024. El fondista es el único boliviano clasificado para los JJOO con marca, y por ello era uno de los favoritos para subir al podio en los Panamericanos.
Garibay, de 35 años, está teniendo un año espectacular, que comenzó en febrero con su clasificación para los JJOO gracias al tiempo que hizo en la Maratón de Sevilla (2h07’4″, su mejor marca personal), obteniendo el puesto 13. Luego, hace un mes fue el mejor de la Maratón Ciudad de México, estableciendo un récord en la prueba (2h08’23”). El domingo acabó segundo en la Carrera de 16 Km París-Versailles (Francia).
Ninavia tampoco estará en los Panamericanos porque la California Baptist University (EEUU), donde estudia y entrena gracias a una beca, informó que no lo cederá para que compita por Bolivia. La universidad apuesta a que el atleta los represente en un evento, a realizarse cabalmente en las mismas fechas que los Panamericanos.
El semifondistas orureño, de 20 años, es campeón Sudamericano Sub-23 en 5.000 metros y 10.000 metros. También obtuvo la medalla de plata en los 1.500 metros en los últimos Juegos Bolivarianos. Precisamente, Ninavia tenía el cupo asegurado en los Panamericanos para los 5,000 metros gracias al oro que logró en esa distancia en los Panamericanos Juniors que se disputaron en 2021 en Colombia.