Han transcurrido 45 años desde que Nadir Reymond dio sus primeros acelerones en el automovilismo. En la actualidad compite en el campeonato departamental de bugguies y anticipó que seguirá en el deporte tuerca “hasta que Dios lo permita”.
Confesó que su pasión por la velocidad y la competencia nació a temprana edad, primero en ciclismo y luego en automovilismo.
“No existe un límite dentro de mi cabeza porque eso lo pone Dios y él me dirá hasta cuando voy a correr”, afirmó Reymond, quien se registró en la categoría 1.600cc estándar para disputar la primera fecha de la temporada 2024 del Club de Bugguies, prevista el 6 y 7 de abril en Warnes.
“Para mí el mejor resultado es la satisfacción de terminar una carrera sin importar la ubicación”, indicó Reymond, que tiene de navegante a Víctor Hugo Farell y compite en el Club de Bugguies desde el 2003.
En forma paralela al deporte tuerca, Reymond construyó una trayectoria de 33 años como árbitro de fútsal. Ejerció esta profesión durante tres décadas a nivel nacional y dos a escala internacional.
