Marco Ruiz fue el estratega del equipo femenino de Calleja, que logró el ascenso a la Primera A femenina para el próximo año. El equipo de la Tahuichi tuvo una campaña excepcional, terminó invicto la primera fase todo contra todos, jugando 16 partidos. En la liguilla por el ascenso empezó con una derrota sorpresiva, pero supo reponerse y logró ascender antes de la última fecha.
Ruiz ahora espera el próximo año para encarar el campeonato de la Primera A.
«Fue muy importante la confianza que depositó en mi persona el ingeniero Rolando Aguilera, presidente de la Academia Tahuichi, que me pidió dirigir el equipo con el compromiso de buscar el ascenso a la Primera A y gracias a Dios lo pudimos cumplir. Agradezco a toda la Academia y al cuerpo técnico que también ayudó, al preparador físico que nos incorporaron», dijo Ruiz a Podio.bo.
El director técnico se mostró agradecido con Dios «por darnos esa alegría de haber logrado el ascenso para el próximo año».
«Las claves para ascender fueron el compromiso que tuvieron todas las chicas para cumplir el objetivo que nos trazamos, siempre con humildad, con sacrificio, con el esfuerzo y empeño que le pusieron cada día de los entrenamientos», dijo Ruiz.
El técnico dijo que «éramos un equipo muy joven, con chicas de 15 y 16 años, y eso era una ventaja para los otros equipos, pero gracias a Dios, siempre les hablamos que si creían en ellas mismas todo era posible».
«La Primera A es un campeonato más competitivo pero nos vamos a preparar de la misma manera. Tenemos que mejorar en el aspecto ofensivo y defensivo», señaló.
Además indicó que todas las jugadoras fueron artífices para lograr este objetivo, desde la portera hasta las suplentes.
Finalmente, Ruiz dijo que el apoyo también de los padres también fue importante para el ascenso. «No solamente dándole el permiso para ir a entrenar y prepararse sino también el apoyo incondicional que le dieron cada día con refrigerios, llevándole merienda cuando jugábamos. Así las chicas siempre se sintieron motivadas para darles una alegría y esa alegría por fin llegó».