La selección boliviana de fútbol playa cerró su participación en la Copa América de la disciplina, disputada en Chile, con una derrota por 4-2 ante Venezuela. Con este resultado, el combinado nacional se ubicó en el octavo puesto del torneo, tras un desempeño marcado por una victoria y cuatro caídas.
Bolivia tuvo un inicio prometedor en el torneo al imponerse por 3-2 a Ecuador, pero luego sufrió derrotas ante Chile (3-1), Colombia (7-6) y Uruguay (4-2), lo que la dejó sin opciones de avanzar a instancias decisivas.
En su último partido, ante la Vinotinto, la Verde comenzó con ventaja gracias a un gol de Brian Ortiz sobre el final del primer tiempo. Sin embargo, Venezuela reaccionó en la segunda mitad con anotaciones de Alexander Vaamonde y Carlos Pérez, remontando el marcador (2-1). Bolivia no se rindió y empató a través de Dimas Garzón, pero la efectividad venezolana definió el partido con un gol de José Semprún y un autogol de Garzón, sellando el 4-2 final.
Pese a los resultados adversos, la selección boliviana mostró competitividad en cada encuentro, dejando una base de trabajo para futuras competiciones en la disciplina.
