Como muy pocas federaciones nacionales lo hicieron. La Federación Boliviana de Taekwondo (FBTK) está cubriendo todos los gastos de la participación de la selección nacional, que desde este viernes participará en el Campeonato Internacional Río Open G2 y que es prácticamente un Mundial, pues cuenta con la asistencia de deportistas de más de 40 países.
La FBTK, que preside Ana Hernández, se ha hecho cargo del costo de transporte, alimentación y vivienda de Celeste Áñez y Jireh Hurtado, en damas, y Elvio Costas y Juan Pablo Montalvo, en varones. Además del entrenador Aldrin Áñez.
Los que debían viajar al Río Open G2 eran seis deportistas, pero a último momento se bajaron dos de la nómina: la chuquisaqueña Daniel Daza Pardo, por decisión personal, y Paulino Mansilla, por lesión. Daza, además de Montalvo, son los taekwondistas nacionales clasificados para los Juegos Panamericanos Junior, a desarrollarse del 9 al 23 de agosto de este año en Asunción, Paraguay.
“Les hemos pagado todo a los chicos. Todo es plata de la autogestión de la federación”, sostuvo Hernández, que es una de las impulsoras del roce de los taekwondistas nacionales, fundamental para apostar a grandes logros internacionales. Es más, también es la principal gestora para que las competencias nacionales aumenten en cantidad y calidad.
