El primer Campeonato Nacional de Strogman/Strongwoman del año dejó más que satisfechos a los deportistas participantes y a los organizadores, pues hubo 27 competidores, mujeres y hombres, un número importante si se considera el poco tiempo desde que ha iniciado la campaña de masificación por parte de la Federación Boliviana de Atletas de Fuerza.
Varios jóvenes, todavía con el cuerpo delgado, mostraron su entusiasmo en el torneo realizado el Día del Padre; otros con el torso y las piernas más voluminosos se pavoneaban en el escenario. A su turno, se fajaron la cintura con gruesos cinturones, se calzaron rodilleras y se empolvaron las manos para alzar el mayor peso posible en las cuatro pruebas: peso muerto con escalera, cilindro, costales de arena y sentadilla.
A simple vista, parecía sencillo elevar los aparatos, pero estos atletas comprobaron que la gravedad hace su trabajo jalando los brazos hacia abajo con una presión inusitada. Crujen las articulaciones, sienten que la sangre se agolpa en la cara y que el cuerpo se va a desintegrar, al punto de que el esfuerzo nubla la mente por algunos milisegundos y el instinto dice que hay que largar la carga para no estallar.
Ese dolor intenso lo provocan algunas decenas de kilos apilados a propósito en el cilindro, en las barras de metal o en los sacos llenos de arena, pero no cualquiera puede alzarlos, solo los campeones que emplean muchas horas en rudos entrenamientos y en dietas alimenticias balanceadas.
Esa experiencia la vivieron algunos de los nóveles atletas que movieron las piezas metálicas por primera vez en un torneo nacional. Los más corpulentos y, por ende, los más experimentados, dieron ánimos a los principiantes porque la idea es incentivar este deporte en los más jóvenes, damas y varones, expresó Cristian Quiroga, multicampeón nacional e internacional.
Entre las revelaciones está Richard Menacho que el año pasado, en el nacional de Sucre, participó por primera vez en un evento de fuerza y, junto con su hermano Jesús, fueron la sensación del torneo como iniciantes. El sábado Menacho hizo una buena performance, pero compitió en la categoría de Cristian Quiroga, por lo que no tuvo opción con el que ahora su maestro.
Empero, es un gigante en evolución que ha decidido cambiar de deporte, pues Menacho y su hermano Jesús vienen de jugar rugby. Conocieron a Quiroga en su gimnasio, a donde llegaron a entrenar enfocados en adquirir fuerza para los partidos de rugby, pero la rutina del hombre más fuerte los sedujo y ahora no piensan dejarlo.
La jovencita Katherine Morrison es otra gran levantadora que está aprendiendo los trucos con los diferentes aparatos, pero reconoce que necesita ser más constante para alcanzar la cima en su categoría. Tendrá que luchar bastante, pues en su serie de más de 67 kilos está la gran campeona Grace Conley, la más fuerte de Bolivia y de Sudamérica.
El sábado, Morrison quedó segunda con 7 puntos, detrás de Conley, con 12 y arriba de Laura Money, con 5 unidades.
Resultados del 1er Nacional
Categoría 76 kilos, Carolina Caballero y Analí Martínez empataron en el primer lugar con 9 puntos; segunda quedó Leidy Canaza, con 6 unidades.
Categoría más 67 kilos: primera, Grace Conley, con 12 puntos; Katherine Morrison, 7 y Laura Money, 5 puntos.
Categoría 90 kilos, varones: primero, Martín Tórrez, con 7 puntos; segundo, Diddier Celin, con 5.
Categoría 105 kilos, varones: primero, Clodove Romero, 8 unidades; segundo, Sergio Serrudo, 2.
Categoría Open, 105 kilos: Cristian Quiroga, 23 puntos; segundo, Aldrin Oxa, 21 puntos; Luis Aguilera, 15 Nacor Terán, 9; Richard Menacho, 8.5 unidades; Jesús Menacho, 7.5 puntos.
Categoría Master más de 40 años: primero, Kelvin Canaza, 6 puntos; segundo, Germán Fernandez, con 3 unidades.
Categoría iniciantes, damas: primera, Luz Mamani, 5 puntos; segunda, Aracely Salinas, 4.
Categoría iniciantes, varones: primero, Mario Rojas, con 13 puntos; segundo, Alejandro Arteaga, cn 12; tercero, Michael Flores, con 9.5; Bryan Alemán, con 7.5 unidades, y Jaime Alegri, con 3 puntos.
El certamen se llevó a cabo en el coliseo cerrado del Distrito Municipal N°5, sobre la avenida Alemania, entre séptimo y octavo anillo, donde cerca de un centenar de espectadores se dieron cita para apoyar a sus favoritos.
Llamó la atención una barra muy particular que alentaba desde las gradas a Kelvin Canaza, un atleta con grado de militar, al que un grupo de soldados fue a apoyarlo, lo cual fue importante, pues ese respaldo se tradujo en su triunfo en su categoría.