Tras un 2022, en el que no consiguió ser campeón Nacional y Latinoamericano, como venía ocurriendo desde que a los 5 años comenzó a competir en el bicicross, el montereño Santiago Joffre Paz está encaminado a buscar su revancha en 2023.
Santiago se quedó sin la corona Nacional luego de sufrir una caída y lastimarse la costilla, lo que le impidió participar en la fecha de Cochabamba, resignando así la posibilidad de llevarse la corona. En el Latinoamericano también se quedó en el camino rumbo a la corona, luego de participar en seis de ocho pruebas. Ese par de ausencias fueron determinantes para que se quede con las manos vacías.
En esta temporada, en el Nacional se ubicó tercero y primero, respectivamente, en las dos fechas que ya se disputaron, mientras que en el Latinoamericano acabó sexto. Esta semana viajó a Brasil, donde buscará el sábado y domingo conseguir las coronas de la tercera y cuarta fecha del Latinoamericano.
A nivel departamental, comenzó en esta temporada a participar en la superclass, una categoría destinada para pedalistas de 16 años para arriba. El objetivo es que gane roce y tenga mayor competencia para mejorar su nivel, siempre pensando en las pruebas nacionales e internacionales.
Su actual entrenador es Igorin Vaca, quién lo acompaña actualmente en su viaje a Brasil. Con él comenzó a prepararse desde 2022, pues antes estuvo entrenando bajo el mando de Diego Rojas y Widen Willis.
Un inicio duro
Santiago se inició en el bicicross cuanto tenía cuatro años. Su padre Wilfredo Joffre (+), que falleció un año después, tuvo la felicidad de verlo salir campeón Latinoamericano en Chile. Luego el pequeño campeón tuvo que batírselas con el apoyo de su madre Denisse Paz, que lo ha visto consagrarse muchas veces.
“Suma varios títulos. Y este año él me dijo que va por su revancha, pues en 2022 quedó en camino de repetir las celebraciones”, sostuvo su progenitora. Agrega que la experiencia de su hijo es positiva en Mundiales, pues en Bélgica y Colombia, en 2015 y 2017, respectivamente, logró meterse entre los 16 mejores. En el primer campeonato sus rivales fueron 98 y en el segundo 56.
