Alejandra «Locomotora» Oliveras, la reconocida exboxeadora de 46 años, continúa internada en la unidad de terapia intensiva, en estado crítico y con pronóstico reservado, tras haber sufrido un ACV isquémico hace más de una semana.
Según los últimos partes médicos, incluyendo uno difundido el 23 de julio, la situación clínica de Oliveras se mantiene estable, con monitoreo neurológico permanente y asistencia mecánica respiratoria. El Dr. Bruno Moroni, director del centro de salud, ha señalado que, si bien se logró evitar la muerte encefálica, el contexto sigue siendo grave.
La lesión que sufrió es grave y se localiza en el hemisferio izquierdo del cerebro, lo que ha provocado un «daño irreversible». Esto implica que, de lograr superar esta etapa crítica, Oliveras presentará secuelas neurológicas. Aún no se pueden precisar la magnitud de estas secuelas, pero se espera que afecten la funcionalidad, la parte cognitiva y la motora. Se ha indicado que el ACV podría estar asociado a un cuadro de hipertensión no controlado previamente.
Actualmente, su vida depende de la asistencia respiratoria y la medicación para la hidratación y nutrición enteral, así como analgésicos. Los médicos están enfocados en sostener la estabilidad clínica de la paciente, reconociendo que la recuperación, de darse, será lenta y prolongada. Su historial como deportista podría brindarle una reserva funcional en sus órganos que podría contribuir a su recuperación.