El fútbol femenino necesita apoyo de la empresa privada, respaldo de las autoridades, visibilidad, y que se busquen soluciones para sus problemas de toda la vida, como ser la falta de canchas y condiciones de entrenamiento. Todos esos inconvenientes, que son un freno para su desarrollo, estuvieron entre los temas que se tocaron en el conversatorio denominado “Fútbol femenino, oportunidades y desafíos de las mujeres a través de la práctica deportiva”, realizado el jueves en el salón de Utepsa.
La actividad, que fue muy provechoso para el fútbol femenino, fue impulsada por el Centro San Isidro (CSI) a través de su proyecto “INVICTAS, Deporte Social”, el cual ha buscado promover la participación y el diálogo en torno al fútbol femenino en la sociedad boliviana.
Gracias al apoyo invaluable de la comunidad Inspira Alumni Bolivia y la Embajada de Estados Unidos en Bolivia, el proyecto “INVICTAS, Deporte Social” pudo llevar a cabo una serie de encuentros de fútbol liderados por mujeres y ha culminado con una valiosa investigación social que revela aspectos fundamentales sobre la realidad del deporte femenino, destacando especialmente el fútbol femenino en Santa Cruz de la Sierra.
El conversatorio reunió a distinguidas personalidades, entre las que destacan autoridades públicas, representantes de empresas y clubes deportivos, talentosas jugadoras de fútbol, estudiantes y medios de comunicación. En el evento se abrió un espacio de reflexión y análisis sobre la situación actual de las mujeres en el ámbito deportivo, con especial énfasis en el fútbol femenino. Asimismo, se generaron propuestas y acciones concretas para impulsar el crecimiento y la equidad en esta disciplina.
«Estamos seguros que el conversatorio fue un hito significativo en el desarrollo del deporte femenino en Bolivia. Es fundamental que la sociedad se una para apoyar y fomentar la participación de las mujeres en el ámbito deportivo, y el fútbol femenino es un pilar esencial en este proceso», afirmó Juan Pablo Sejas, director del CSI.
