Sin planificación y libradas a su suerte, con entrenadores que asumen por un par de semanas, las selecciones bolivianas de fútbol femenino muestran una peor imagen en cada Campeonato Sudamericano en el que participan. Y lo más penoso es que la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) no da la más mínimas señales de mejoría. Uno de los que dio la voz de la alarma sobre la decadencia de esta disciplina en el país fue Napoleón Cardozo, actual técnico del equipo de damas de Blooming y que en su momento dirigió a selecciones bolivianas mayores y de categorías menores.
Una muestra de ello fue la goleada de 5-1 que sufrió la verdecita el jueves a manos de Ecuador, en el inicio del Sudamericano sub-20 de Chile. El resultado sorprende porque las ecuatorianas nunca habían goleado a Bolivia en los ocho enfrentamientos entre ambas selecciones, con tres triunfos para las nacionales y cinco derrotas.
Las caídas fueron en los sudamericanos sub 19 de 2004 (2-1), en el sub 20 de 2010 (2-0), en el sub 20 de 2015 (2-0), en el sub 20 de 2020 (2-0) y esta última en el sub 20 de 2022 (5-1). Los triunfos nacionales se dieron en el sub 20 de 2006 (3-1), en el sub 20 de 2008 (3-2) y en el sub 20 de 2014 (1-0).
Sin un trabajo planificado y serio
Bolivia es el único país de Sudamérica que hasta la fecha no comenzó a trabajar de forma planificada y seria en el fútbol femenino, razón por la cual las goleadas ya se volvieron una constante en sus presentaciones en los sudamericanos.
Una diferencia clave es que en todo Sudamérica, a excepción de Bolivia, se juegan torneos profesionales de fútbol femenino. A ello se suma que los cuerpos técnicos se contratan por dos, tres o cuatro años, con la premisa de que se sigan procesos verdaderos, y no solo como discurso.
También se aprovechan las fechas FIFA para jugar partidos amistosos, lo que no se hace en Bolivia, evitando que las futbolistas tengan el esencial roce internacional, que al final ayuda a hacer la diferencia en partidos oficiales de selecciones.
Sub 17 vapuleada
El mal trabajo que realiza la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) en las categorías menores del fútbol femenino ya se vio reflejado en el Sudamericano sub 17, que se desarrolló los primeros días de marzo en Uruguay.
El entrenador español Javier Escuin trabajó solo ocho días al mando de la verdecita y los resultados fueron durísimos. Bolivia quedó última en el grupo B, con cuatro derrotas, 18 goles en contra y dos a favor.
Y para peor, Escuin dejó el mando luego al darse cuenta de que no tendría las condiciones mínimas para realizar un trabajo planificado con miras a los otros sudamericanos que se venían. Se viene la Copa América Femenina mayores 2022, que será en julio en Colombia, y Bolivia aún no comenzó a trabajar con miras a esa competencia.
Más goleadas
El mal trabajo que se viene realizando en el fútbol femenino boliviano hace presagiar más goleadas en contra de la verdecita en el Sudamericano sub 20, de Chile. Ya se perdió ante Ecuador (5-1), y este sábado se viene Brasil. Luego le tocará con Paraguay y Uruguay.
A excepción de Brasil, el resto de las selecciones hasta hace un poco más de una década no asustaban a Bolivia, que podía jugarles de igual a igual. Ahora las diferencias son abismales, y a lo único que aspiran los equipos nacionales es a no ser goleados.
