Las gestiones y el esfuerzo económico de la Federación Boliviana de Taekwondo (FBT), que preside Ana Hernández, están centradas en respaldar con todo lo que está a su alcance a las dos clasificadas para los Juegos Panamericanos de Santiago, a desarrollarse del 20 de octubre al 5 de noviembre.
Tras lograr los cupos para los Panamericanos, en el Pre-Panamericano de Río de Janeiro, Celeste Áñez y Jireh Hurtado iniciaron una preparación apuntando a dejar el nombre de Bolivia en alto en la competencia, conscientes de que tienen posibilidades de destacar, pues lograron la clasificación por primera vez en la historia por méritos propios, sin estar a la espera de una tarjeta de invitación.
A puro gestión, la FBT les puso a disposición a dos entrenadores de renombre, Aldrin Áñez, el único con Nivel 2 del país, y el cubano Carlos Banasco, con experiencia de formar atletas olímpicos. El primero está a cargo de su hija Celeste, mientras que el segundo entrena a Jireh. Con el ellos, la preparación es a doble turno.
Hernández también consiguió que ambas deportistas realicen un campamento de 15 días en el Cenard de Buenos Aires, donde entrenaron junto a la selección de Argentina. En las dos semanas las acompañó Aldrin Áñez.
Además, la federación tiene confirmado que Celeste y Jireh se entrenen desde comienzos de septiembre, durante un mes y medio, en un campamento en España. Por ello las taekwondistas se encuentran gestionando su visa, también con el respaldo de la FBT.
Para darles todas las condiciones a sus deportistas de preparación, Hernández también acaba de entregarles el material de competición y un seguro de salud anual con miras a los Panamericanos.
