El multicampeón nacional y bicampeón sudamericano Roberto Saba tenía pendiente ganar el Circuito Óscar Crespo, la carrera más emblemática del país, un objetivo que pudo cumplir el domingo pasado al ser el más veloz de prueba nacional que se realiza todos los años en Sucre.
«Estamos muy contentos de ganar esta emblemática carrera después del sabor agridulce del año pasado, cuanto estábamos ganando y faltando 8 kilómetros para el final se reventó la llanta delantera izquierda», recordó Saba.
Con esa experiencia, esta vez Tiro no tuvo sorpresas. «Este año salimos con la estrategia de hacer una carrera inteligente, cuidando las llantas en la primera vuelta para tener mas grip en la segunda, ya que al ser un circuito de 84 kilómetros las llantas sufren mucho y aumentan mucha temperatura», explicó.
Además, valoró el trabajo de los equipos técnicos que lo asistieron: «Agradecer al equipo RS Team, que siempre se esfuerza al máximo para dejarme el auto impecable y también al equipo paraguayo ABR de mi amigo Agus Bestard, que nos dio un impecable Hyundai i20 R5».
Sobre el nuevo coche que utilizó, Saba explicó que no fue fácil manejar el Hyundai, ya que venía manejando un Skoda desde hace un par de años. «Hay muchas diferencias, el Skoda es un auto que ya conocemos venimos corriendo hace años en el y ya tenemos nuestra puesta a punto en la cual estamos cómodos y seguros, sabemos como dobla, como frena etc. El Hyundai no lo conocíamos y sólo hicimos 25 kilómetros de prueba, es un buen auto, pero hay que hacer más kilómetros de pruebas para conocerlo y ponerlo a punto para que el piloto este cómodo y se adapte a su estilo de manejo», señaló el piloto cruceño, que espera correr nuevamente con el Skoda muy pronto.
Por ahora, sólo queda seguir celebrando el triunfo del Óscar Crespo, una competencia pasional. Luego debe pensar en su próxima carrera, que será en Argentina.
